Prefacio
Desde que yo recuerdo, dibujar ha sido una de mis grandes pasiones. El poder crear personajes, hacerlos hablar, actuar y vivir en mundos imaginarios siempre ha sido un deleite para mí. Puedo pasarme horas enteras dibujando y divirtiéndome con todos esos mundos que salen de mi mente. La mayor parte de mi tiempo estoy generando trazos en cualquier espacio gráfico que me lo permita, lo mismo en servilleta de papel que detrás de los manteles de los restaurantes. Siempre llevo conmigo un cuaderno de bocetos para dibujar lo primero que se me ocurra. Algunas veces surgen ideas no muy buenas y otras son espectaculares. En todo caso, lo que más me gusta de mi trabajo es divertirme. Y me pagan por ello. Elegí esta parte del diseño porque tuve una habilidad que cultive desde pequeño, viendo leyendo y escuchando cuanto podía tener a mí alcance. Verás, durante los años 70, en mi época de niñez y adolescencia, no había mucho material que pudieras adquirir como hoy en día: eran inimaginables l